sábado, 7 de abril de 2012

Desfinanciar fármacos


La ministra de sanidad –y otros asuntos– recibe una propuesta para desfinanciar tres grupos de fármacos.
Fuente: elPeriódico.com
Lágrimas artificialesmucolíticos y antidiarréicos podrían ser desfinanciados por el Ministerio de Sanidad sin riesgos para los pacientes y con un efecto de ahorro inmediato para el SNS, según la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp). La nueva ministra, Ana Mato, tiene ya sobre la mesa una propuesta de la patronal de desfinanciación de medicamentos que afectaría a estos tres grupos que en 2010 supusieron un gasto de 131 millones a las arcas del Servicio Nacional de Salud (SNS). (…) antitusivos, que tendrían el riesgo de las presentaciones que lleven codeína (aunque en algunos países europeos éstos se dispensan sin receta), los laxantes, los antiácidos, los antivirales tópicos, los antihistamínicos, los analgésicos no narcóticos y los antimicóticos. 
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Habría que analizar los argumentos científicos en cada caso, pero los tres primeros grupos de medicamentos no pueden considerarse imprescindibles, ni algunos de los citados después y otros muchos fármacos, inútiles o de dudosa eficacia, que incomprensiblemente se siguen financiando con cargo a los presupuestos públicos. Durante muchos años se prescribieron vasodilatadores cerebrales, popularmente conocidos como medicamentos “para el riego”, que dejaron de usarse al no verificarse beneficios superiores a los del placebo. Esto es lo que habría que evitar. Dejar de financiar los  fármacos superfluos, inútiles o de dudosa eficacia, y los novedosos –por lo general más caros– que no supongan ventaja sobre los precedentes, o que sean de dudosa utilidad, sería una medida extremadamente eficaz para contener el gasto y combatir el despilfarro. Por otro lado, desfinanciar medicamentos para síntomas menores, haciéndolos de venta libre (a imitación de países de nuestro entorno), puede tener dos ventajas principales: contribuir a que la ciudadanía se responsabilice de su autocuidado y descargar en buena parte el primer nivel asistencial, ganando tiempo así (o no perdiéndolo por la burocracia que supone la emisión de recetas), para poder centrarse en lo que realmente importa. Y lo que importa es la atención a pacientes con problemas serios, agudos y crónicos, la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. 

4 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo en que se deje como EFP esos medicamentos que, aunque son muy dispensados, son más "prescindibles". Creo que esto ayudaría, entre otras cosas, a descongestionar urgencias y visitas en el ambulatorio. Además, cada vez más hay medicamentos que salen de la financiación (Neobrufen en sobres, Canesten, etc.) la misma indústria pasa de seguir la política de precio mínimo en según qué productos. En Francia, por ejemplo, desfinanciaron hace tiempo los mucolíticos

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    1. Creo que saldríamos todos ganando, Anna. Pero no simplemente desfinanciando marcas comerciales, sino los principios activos (presentados bajo marca o como genéricos) de utilidad "menor" o de alguna manera prescindibles.
      Saludos y gracias por tu comentario.

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  2. José Manuel: te dejo un enlace que quizás te interese (aunque no tenga que ver directamente con los fármacos)

    http://profesorgeohistoria.wordpress.com/2012/04/09/el-15-de-abril-manifestacion-en-defensa-de-la-educacion-y-la-sanidad-publicas/

    Moitos bicos.

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    1. Gracias Lola, por la información.
      Ahora me parecen preocupantes las declaraciones del ministro de Economía, rizando el rizo. Porque ya está todo inventado:

      http://foro.miotragus.org/233-informacion/info-copago-sanitario-funciona-otros-paises-44720/

      Y le sale alguna respuesta contundente:

      http://www.p-lib.es/sanidad/respuesta-guindos-copago/

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