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miércoles, 16 de junio de 2010

Aforismos médicos 6


En esta sexta parte presento refranes y otras sentencias concisas, englobadas todas bajo el epígrafe de aforismos, considerando lo expuesto en la primera parte. No habiendo constancia de la autoría, hemos de dejarlos como anónimos. Comulgando o no con ellos, os dejo otra docena sobre medicina y humor:
  • Un médico cura, dos dudan, tres muerte segura.
  • A enemigo, mándale médico amigo.
  • De médico que trasnocha y cura que va al café, ¡líbranos Dominé!
  • El doctor galeno cura al que estaba bueno.
  • Quise ser forense para que no se me muriese nadie.
  • La diferencia entre Dios y los médicos es que Dios no se cree médico.
  • Si los médicos no saben escribir, cómo van a salvar vidas.
  • Hay que tener cuidado con los libros de salud, podemos morir por culpa de una errata.
  • La buena medicina es aquella que mejora el cuerpo y no asalta el bolsillo.
  • Consultas de pasillo: ni dan fama ni curan ni llenan el bolsillo.
  • Hay enfermos con salud de hierro.
  • El humor es una verdadera medicina.
***
El humorismo es un antídoto a los estados de aflicción, benefactor de todos los humores o líquidos corporales, promotor de salud y terapéutica del fracaso. Recordemos que el humor es una de las condiciones que considera William Osler para ser un buen médico, en sus “4 h”: humildad, honestidad, humanidad y humor (Aforismos médicos 2). Y aunque los dichos recogidos aquí son excesivos, de gusto agrio o de negro tinte, veamos el humor en sentido amplio como antídoto de la desgracia, como necesario remedio para sobrevivir en este valle de lágrimas.

10 comentarios:

  1. Amigo José Manuel:
    El tiempo que llevo leyendo de forma continuada este blog tuyo me permite afirmar que eres uno de esos médicos que cumplen, absolutamente, las condiciones para ser un buen médico que enumeraba el gran Osler: el conocimiento y las "4h".
    Esta serie sobre "aforismos" es magnífica. Conviene leerla y releerla, de vez en cuando.
    Yo, si me lo permites, voy a añadir no dos aforismos -que, en ellos, el experto eres tu- sino dos citas, sobre la opinión que siempre, desde los tiempos más antiguos, hemos merecido a los gobernantes. La primera se atribuye a Alejandro Magno (356-323 a.C.): "Me estoy muriendo con el auxilio de demasiados médicos". La segunda se atribuye a Carlomagno (745-812): "Laissez-moi, je mourrai bien sans vos remèdes". (Dejadme, puedo morir bien sin vuestros remedios).
    ¡Nuestros antepasados colegas preocupándose por ellos y mira como les respondían!
    Saludos.

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  2. Estoy seguro, amigo Francisco, de que tú cumples mejor que yo las condiciones establecidas por Osler (una cosa son las buenas intenciones y otra las acciones). La serie de aforismos es el resultado de particulares criterios selectivos y de de ordenamiento; no hay otro mérito.
    De las quejas del los pacientes (magnos o no), pienso que no provenían -ni provienen- de las malas atenciones, sino de las humanas limitaciones. Porque no siempre se puede curar; a veces sólo cabe aliviar y consolar.
    Un abrazo, querido Francisco, y gracias por tu enriquecedora aportación.

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  3. Pepe: con esas cuatro haches seríamos buenos en medicina y en cualquier parcela de la vida humana. Vosotros los médicos, en los tiempos que corren, deberíais recetar honestidad a grandes dosis a unos cuantos que todos sabemos, a lo mejor así...

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  4. Hola Jose Manuel: aunque estoy segura de que conoces esta greguería te la dedico porque va de médicos y músicos
    "Tocólogo debía ser el músico y no el partero... pero nadie se atreve a cambiar los nombres que falsamente llevan las cosas"
    Espero que te restablezcas pronto.
    Saludos

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  5. Desde luego, querido Pablo, que con esas cuatro haches seríamos unos hachas. Y ¡ay, si pudiésemos recetar comprimidos de honestidad y vacunas anticorrupción!...

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  6. Ignorante de mí, querida Conchi, pues no conocía esa greguería médico-melódica (o se había disipado en los altos hemisferios). Las greguerías de Gómez de la Serna son un filón inacabable.
    Gracias por tu participación y tus buenos deseos. Un beso.

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  7. Me has hecho sonreir, José Manuel (aunque eso no es muy difícil en mi caso, que me río hasta de mi sombra) Todos son estupendos pero el último es definitivo.
    Te deseo mucha salud y mucho humor.

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  8. Me alegro, amiga Lola, de que hayas sonreído aún un poco más que de costumbre. Podría haber elegido otros aforismos relacionados, pero valgan estos doce que me parecen significativos.
    Un saludo sonriente y agradecido.

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  9. Hola, soy nuevo en el blog, me encanta lo que se lee en el.
    Lo de trasnochar no creo que sea tan peligroso porque la noche está llena de colegas.
    No se si llega a aforismo pero te aporto el siguiente: "dos dolores separados más de un palmo no son nada". Me lo dijo mi tutor hace muchos, muchos años.
    Salut

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  10. Bienvenido, Pèsol, a este espacio médico-melódico. El dicho que aportas me parece un buen aforismo.
    Salut y gracias por el comentario.

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