—Si volviera a empezar, yo elegiría igualmente medicina.
—Si pudiese volver al pasado, yo no escogería medicina.
¿Merece la pena elegir medicina? Nos lo preguntábamos como reflexión anexa a la entrada «La incierta medicina: una reflexión gradual».
Uno puede preguntarse si compensa estudiar medicina y entregarse a una profesión sacrificada. La carrera es larga y, además de tiempo, exige dinero y esfuerzo. Y el ejercicio supone gran responsabilidad, entraña riesgo y requiere entrega, acaso incluyendo noches, fines de semana y días festivos. Trabajar como médico en esas horas, que para la mayoría de la población suponen tiempo libre, no es lo mismo que hacerlo en una determinada actividad artística. No obstante, la medicina también tiene su parte buena: es una profesión apasionante que reporta grandes satisfacciones; el compromiso con las personas y las poblaciones reporta el agradecimiento de quienes reciben cuidados o ven mejorada su salud. En definitiva, hay que sopesar las ventajas y desventajas de estudiar medicina (por un lado: satisfacción, prestigio, sueldo...; por otro: exigencia, guardias, formación continua...), que no son absolutas, dependen de cada circunstancia. La vocación puede ser determinante, por encima de intereses prácticos. Pero, hoy más que nunca, cabe la pregunta: ¿Estudiar medicina es rentable? Dirá alguno que, como en todo, depende. Que cada cual responda según su conciencia. O siga con su sueño...
A Dream within a Dream - Alan Parsons Project
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Connotaciones de la Medicina
Tiene la Medicina, unas connotaciones que no lleva ninguna otra actividad humana, y que la hace, de algún modo, singular: 1-Que es y será siempre, una ciencia inexacta: 2- Que se desenvuelve en extremos de máxima responsabilidad. —Juan F. Jiménez Borreguero, Las tres lacras de la Medicina.
Elección de especialidad médica
Y si uno tiene claro que quieres ser médico, sirvan de guía el vídeo «10 claves para elegir bien especialidad médica» y este algoritmo humorístico.
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