Giacomo Puccini (1858-1924) |
"Me he hecho a mi mismo una pregunta extrema para poder decidirme. ¿Si en algún momento, obligatoriamente, te tuvieses que quedar con una sola ópera de Puccini, con cual te quedarías?, y después de que me pasase el escalofrío, solo por pensar en tan magna desgracia, me he decidido por Madama Butterfly. ¿Y porqué?, la japonesita y no Tosca, que es dramática y musicalmente la pera repera requetepera, o La Bohème que tiene los cuatro actos mas perfectos que nunca se hayan escrito, donde la comunión entre música y teatro es magistral, pues porque Butterfly contiene los tres momentos, bajo mi punto de vista, mas sublimes de toda la producción puciniana, que son: la entrada de Cio Cio San (sublime, espeluznante, inmejorable, EL TODO DE LA OPERA); el mejor dúo de amor de toda la historia de la OPERA; y la escena que habiéndola escuchado miles de veces, siempre me hace llorar, que es la que comienza con "Una nave di guerra...". Estas tres sencillas razones son las que me han movido a votar por la Madama Butterfly. Sé que Tosca y Mimi lo comprenderían perfectamente."
[Comentario en foro musical]
Madame Butterfly (1904): Un bel di dé, vendremo
La Bohème (1900): Quando men´vo
“No será tan conocida como Madama Butterfly o La Bohème, pero la pura verdad es que la Tosca es una obra sublime, que te pone el puñal al cuello con tal sutileza que antes de darte por enterado ya tienes la sangre encima. Para empezar, la historia (de complejísima sencillez), es extraordinaria, por muy tocado que esté el argumento del amor en tiempos jodidos (la revolución, o lo que fuera), que es el mismo viejo argumento que ni muere ni morirá (oigan, que eso ya lo había hecho Homero, ¿no?). En cuanto a la música... bueno, es que aquí las palabras se me escapan. ¿Cómo carajo puedo dibujar con letras el pedazo de perfección que es, a mi juicio, la Tosca de Puccini? Es que es algo que hay que escuchar... En todo caso, diré que, desde las primeras notas, uno entra a un torrente furioso del que es imposible librarse: una ópera violenta, pero elegante; poderosa, pero sutil; magnífica...”
[Extracto de entrada en blog]
Tosca (1900): Vissi d'arte
Los textos precedentes pertenecen a dos aficionados a la ópera. En el primero, el comentarista se debate entre tres óperas de Puccini con sendas protagonistas femeninas, Cio-Cio San (Madama Butterfly), Tosca y Mimi (La Bohème), eligiendo a la primera por las razones referidas. El segundo también lo tiene claro y se decanta por la segunda. Por mi parte, reconozco también mi debilidad por Tosca (sin olvidarme de Turandot, la última gran ópera, inacabada, del compositor italiano, cuyo nombre es también el de la protagonista femenina), tal vez por esa grabación en la que canta Maria Callas, junto a Giuseppe di Stefano, Tito Gobbi, con el Coro y Orchesta de la Scala de Milán, bajo la dirección de Victor De Sabata. En cualquier caso, ese trío de ases operístico es imprescindible; con la cuarta ópera referida completaríamos un póker pucciniano definitivo.
Turandot (1926): Nessum dorma
***
Sobre Giacomo Puccini (1858-1924)
Compositor italiano de ópera, entre los más grandes de fines del siglo XIX y principios del XX, considerado heredero Giuseppe Verdi. Visionario, creador de los conceptos de música que regirían el cine durante el siglo XX. Usaba pasajes modales o recursos politonales y la tonalidad o la atonalidad por necesidades dramáticas en una obra. Algunas de sus melodías, como «O mio babbino caro», de Gianni Schicchi; «Che gelida manina», de La bohème, o «Nessun dorma», de Turandot, son muy populares.
Giacomo Puccini –Biografías y Vidas
Heredero de la tradición lírica italiana, pero al mismo tiempo abierto a otras corrientes y estilos propios del cambio de siglo, Puccini se convirtió en el gran dominador de la escena lírica internacional durante los primeros decenios del siglo XX. No fue un creador prolífico: sin contar algunas escasas piezas instrumentales y algunas religiosas compuestas en su juventud, doce óperas conforman el grueso de su producción, cifra insignificante en comparación con las de sus predecesores, pero suficiente para hacer de él un autor clave del repertorio operístico y uno de los más apreciados y aplaudidos por el público.
Puccini –iOpera.es
Giacomo Puccini (1900) |
Es que Puccini es maravilloso, querido José Manuel. Qué gusto escuchar estos vídeos tan bonitos. A mí me gusta especialmente el famoso "Qué gélida manina" de la Boheme - que viene al pelo en días de tanto frío en Madrid - pero si tengo que elegir ahora, me quedo con "O mio babbino caro", esa pequeña aria de Lauretta en Gianni Schicchi.
ResponderEliminarAquí te la dejo; disfrútala mucho. Moitos bicos
http://www.youtube.com/watch?v=cK4fCL36LNY
Gianni Schicchi no entraría en el debate pucciniano por ser una ópera "menor", en un acto. Pero la conocidísima aria de Lauretta merece, sin duda, un lugar especial.
EliminarGracias por tu acreditado comentario, cara Lola.