domingo, 31 de octubre de 2021

Femeninas voces



FEMENINAS VOCES

Con luz de amanecer, Victoria llega.
En sueño vespertino está Cesária.
La noche sonorizan Ella y Sarah.
Cualquier hora ya Karen eterniza.
El aire se desgarra con Édith.
La piel se eriza cuando canta Olga.
Viaja la mente si Loreena entona.
El cálido poder de Shirley o Barbra
encuentra su aposento. Y de Elisabeth
y Jessye, inenarrables, no me olvido.
Ahora me ha embrujado tanto Elina,
como antes Anne Sophie. Mujeres todas,
cantoras grandes que llegáis a mí...
¡Cantad! ¡Cantadme siempre! Hasta morir.

***

Las cantantes referidas: Victoria de los Ángeles, Cesaria Évora, Ella Fitzgerald, Sarah Vaughan, Karen Carpenter, Édith Piaf, Olga Guillot, Loreena McKennitt, Shirley Bassey, Barbra Streisand, Elisabeth Schwarzkopf, Jessye Norman, Elīna Garanča y Anne Sophie von Otter. No están todas las que son (mis voces femeninas preferidas), pero sí son todas las que están.

Ave María, William Gómez – Elīna Garanča
ELINA
Voz cautivadora,
Imagen divina,
Excelsa señora.
Nunca cansa Elina,
Artista y cantora.

viernes, 29 de octubre de 2021

Sobre la imaginación


Imaginación. Facultad de la mente de representar imágenes
de cosas reales o ideales.

La imaginación es creadora; el conocimiento es poderoso. Dudamos de una frase atribuida a Albert Einstein: «La imaginación es más importante que el conocimiento. El conocimiento es limitado, mientras que la imaginación no». Sin embargo, ambas facultades o capacidades nutren al ser humano. Por eso, ya vistos aforismos sobre el conocimiento, traemos otros sobre la imaginación.

  • La imaginación es el ojo del alma. (Joseph Joubert)
  • El que tiene imaginación, con qué facilidad saca de la nada un mundo. (Gustavo Adolfo Bécquer)
  • La imaginación tiene sobre nosotros mucho más imperio que la realidad. (Jean de La Fontaine)
  • Nuestra imaginación nos agranda tanto el tiempo presente, que hacemos de la eternidad una nada, y de la nada una eternidad. (Blaise Pascal)
  • La imaginación abre a veces unas alas grandes como el cielo en una cárcel grande como la mano. (Alfred de Musset)
  • La imaginación sirve para viajar y cuesta menos. (George W. Curtis)
  • Todo lo que una persona puede imaginar, otros pueden hacerlo realidad. (Julio Verne)
  • En las tinieblas la imaginación trabaja más activamente que en plena luz. (Immanuel Kant)
  • En los momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento. (Albert Einstein)
  • La imaginación y la experiencia van de la mano. Solas no andan. (José Ingenieros)
  • Las personas reales están repletas de seres imaginarios. (Graham Greene)
  • El que tiene imaginación sin instrucción tiene alas sin pies. (J. Joubert)

Imagination – Chet Baker

martes, 26 de octubre de 2021

Albert Schweitzer, reverencia por la vida

Fuente: gettyimages

«Es el hombre más grande de nuestro siglo».
Albert Einstein sobre Albert Schweitzer

Albert Schweitzer (1875-1965) fue un médico, filósofo, teólogo, músico y escritor franco-alemán. Como escritor, ya lo hemos citado en la entrada «Médicos escritores y viceversa», considerándolo un verdadero polímata. Por su labor en África como misionero médico (fundó el Hospital Albert Schweitzer en Lambaréné, Gabón) y por poner en práctica su filosofía de «Reverencia por la vida», le concedieron el Premio Nobel de la Paz en 1952. Musicalmente, destacó como organista y gran conocedor de la obra de Bach. Sin duda, un gran médico humanista y mucho más.

Más sobre Albert Schweitzer

Albert Schweitzer. El hombre como símbolo

Albert Schweitzer, el gran médico-misionero del siglo XX, poseía una personalidad versátil integrada en múltiples talentos, lo cual produjo la conjunción poco frecuente del pensador con el hombre de acción y del humanista con el científico y el artista.
Reproducimos su propio testimonio: «Era catedrático de la Universidad de Estrasburgo, organista y escritor, y lo abandoné todo por ser médico en el África Ecuatorial. ¿Por qué? Diversos escritos y testimonios orales de misioneros me habían revelado la miseria física de los indígenas de la Selva Virgen. Cuánto más pensaba en ello, más dificultades encontraba para comprender que nosotros, los europeos, nos preocupásemos tan poco por la gran misión humanitaria que nos incumbe en aquellas tierras lejanas». 
Algunas frases de Albert Schweitzer
  • Un buen médico debe escuchar como un sacerdote, razonar como científico, actuar como un héroe y hablar como una persona normal. [1]
  • El dolor es para la humanidad un tirano más terrible que la misma muerte. [2]
  • El propósito de la vida humana es servir, mostrar compasión y tener voluntad de ayudar a otros.
  • La gran tragedia de la vida no es la muerte. Es lo que dejamos morir en nuestro interior mientras estamos vivos.
  • La edad arruga la piel, pero renunciar al entusiasmo arruga el alma. [3]
  • Con veinte años todos tienen el rostro que Dios les ha dado; con cuarenta, el que les ha dado la vida y con sesenta el que se merecen.
  • La felicidad no es más que buena salud y mala memoria. [4]
  • A la pregunta de si soy optimista o pesimista, yo respondo que mi conocimiento es pesimista, pero mi voluntad y mi esperanza son optimistas.
Fuente: gettyimages
 
Y para finalizar la semblanza de este hombre multitalentoso, una muestra de su arte como organista interpretando a Johan Sebastian Bach, su debilidad.

Bach por Albert Schweitzer
Al pie del vídeo, listado de obras y enlaces. 
La famosa Tocata y fuga en re menor AQUÍ

***

Nota: «Un buen médico debe...»

Hemos recibido algunos comentarios a la primera frase de Schweitzer («Un buen médico debe...»), cuestionando la posibilidad de llevar a cabo su propuesta en las circunstancias actuales, sobre todo por la falta de tiempo para la atención adecuada a los pacientes. Y hemos dado estas dos respuestas complementarias:

 —Evidentemente, Schweitzer se refería a un médico «libre», con entera capacidad de decisión, no a un «funcionario» condicionado (esclavizado) por el tiempo y la burocracia.

—Schweitzer propone el ideal de un médico humanista. Nuestra realidad convierte prácticamente su propuesta en un imposible.

domingo, 24 de octubre de 2021

Idea de la mortalidad


Ni obsesionarse con la muerte ni negarla: mirarla de reojo

Capítulo 35 de El último nocturno. Párrafos: Idea de la mortalidad. [Saladino Barreiros reflexiona sobre la idea de la mortalidad y deja su testamento vital.]
En definitiva, Saladino hallaba dos alternativas vitales extremas: dejar pasar el río terminable (que es sólo un instante para quienes divinizan la muerte como única verdad) o interpretar el curso de las aguas; de manera más prosaica, reír en lo posible antes del definitivo llanto o llorar a cada paso. Y una opción intermedia: mantener el equilibrio entre sonrisas comedidas. Se quedó con la idea de que no elegimos el nacer ni podemos impedir el morir. Y continuando con su introspección, comenzó a realizar el enfoque de cómo y dónde morir, yendo hacia las honduras de la bioética: «Nadie duda de su preferencia de morir sin dolor y en casa, en la propia cama y de manera digna. Nadie quiere sufrir una enfermedad terminal y morir en un hospital, alejado del ambiente familiar, de lo que es cercano y proporciona sosiego. Nadie cambiaría el calor del hogar por la frialdad de una clínica. Todo el mundo desearía morir de repente, sin darse cuenta…». Así que, en una dolorosa situación límite, sin más elección terapéutica que la paliativa, para mitigar el sufrimiento y mantener una vida vegetativa, uno podía plantearse una posibilidad que encierra una doble significación antagonista, desprecio y compasión, dureza y dulzura, crueldad y misericordia: la eutanasia.

(...)

Con previsión, Saladino Barreiros había dejado escrita su voluntad de que no prolongasen su vida ausente del mundo emocional; en su testamento vital se negaba a dilatar una agonía, lleno de tubos, dependiente de sondas, cánulas y catéteres. También dispuso su deseo de renuncia a honores desmedidos; nada de despliegues funerarios, de teatral boato, para honrarle. Procuraba abrazar la sencillez, no aspirando a tumbas exclusivas, a huesas desmesuradas, a sepulcros magníficos, a extraordinarios panteones o a suntuosos mausoleos; ni, por supuesto, a túmulos o a pirámides que revelan orgullo o terrenal supremacía y que, simbólicamente, acercan a un cielo ignoto e inmerecido. Le bastaba con que incinerasen lo que quedara de su cuerpo y sus cenizas se confundiesen con el viento o con las aguas de su mar inmortal y fascinante, de su querida bahía de Vizana. Se conformaba con dejar el recuerdo de un hombre honesto y sencillo, que rehusara el mal y la codicia, que marchaba en paz tras expirar con decencia.


Peace – Horace Silver

viernes, 22 de octubre de 2021

El hechizo de la lluvia


La lluvia moderada es relajante

Capítulo 30 de El último nocturno. Párrafos: El hechizo de la lluvia. [Saladino Barreiros contempla la lluvia al cobijo del hogar y evoca su pasado ultramarino.]

El cielo descargaba con violencia su inmensa vejiga; agua, agua, agua que no empapaba las ideas. Era un continuo lloviznar; monotonía de lluvia tras los cristales, que cantara Machado. El vertido acuático de las nubes llegaba a ser pesado en Vizana; había épocas en que parecía que no iba a parar nunca. Entonces perdía su singular encanto. Pero Saladino se empeñaba en perpetuar el hechizo de la lluvia, contemplando su discurrir como naturaleza hecha arte. Eran momentos para dejarse llevar, en los que la mente descansaba y se imponía el sentimiento. Le dieron ganas de encender una pipa o echarse un cigarrito, en un acto reflejo que ignoraba su abandono del tabaco hacía tres decenios. «Lástima que las bondades de ese producto vegetal no hagan olvidar sus perjuicios; el placer de su humeante compañía no excusa de sus asfixiantes consecuencias», sentenciaba en actitud de rechazo de los malos vicios. Seguía teniendo en su mente la visión del Nuevo Mundo, de la isla de Hacubey, de la ciudad de Sago.

Allá cuando llovía, también llovía de lo lindo...


Jardines bajo la lluvia, Claude Debussy
***

miércoles, 20 de octubre de 2021

Atención primaria: algo sobra y algo falta


Con y sin pandemia,
en atención primaria sobra improvisación y falta organización.

Diagnóstico de una médica de familia del malestar en la red de centros de salud después de una pandemia devastadora y con una plantilla exhausta


Este artículo nos suscita la siguiente reflexión.

Y pensar que en los medios se aplaudía la gestión del Principado de Asturias... Al final, la chapuza y la improvisación han sido generales. En particular, la gestión de la citación telefónica mediante el «call center» ha sido un despropósito. Las promesas de mejora, como siempre, incumplidas. Los gobernantes no ven profesionales sanitarios sacrificados, sino chivos expiatorios; y tampoco ciudadanos a los que servir, sino fuentes de votos para mantener su apoltronamiento. De pena. Creo que el futuro de la AP es muy negro; y si se reorganiza –inteligentemente–, tendrá que ser con menos sanitarios, porque cada vez hay menos. Lo cual hasta puede ser bueno, pues por fin habrán de limitarse a realizar  las funciones que les corresponden (por supuesto, eliminando tareas impropias y tanta buRRocracia inútil), con un límite asistencial que pasa por regular la asistencia, lo que supone racionalizarla frente a la inmediatez de las «citas forzadas» de usuarios impacientes. Favoreciendo un clima de trabajo que atraiga profesionales de la salud, en vez de expulsarlos del sistema, se evitará llegar a una carencia preocupante. Y lo más importante: saldrán beneficiados los verdaderos pacientes.

Air de Suite nº 3, Johann Sebastian Bach

lunes, 18 de octubre de 2021

Ríos de la historia


Desde los albores de la civilización, en Mesopotamia, y concretamente en Sumeria, la historia de la humanidad no ha sido un camino de rosas. Los momentos gloriosos, de mejoras sociales y económicas, de descubrimientos científicos, de paz..., se ven enturbiados por otros de miseria, de ruina, de calamidades, de guerra.


RÍOS DAÑADOS

¿A dónde van los ríos de la historia,
de turbulentas aguas bien tiznadas
de sangre y enturbiadas de tristeza,
sinuosos y a veces desbordados?
Pasaron quince mil millones de años
desde la creación del Universo,
o explosivo Big Bang, según la ciencia,
y apenas treinta mil del Homo sapiens.
De civilización, unos diez mil,
y cinco mil históricos que inician
—tres mil antes de Cristo— los sumerios;
empiezan a fundarse las ciudades
en riberas del Tigris y del Nilo.
(Absténganse los sabios de detalles.)
¡Cuántos ríos dañados desde entonces…!
Ahora queda aprender de los errores.

[1996]

Fanfarria para el hombre común, Aaron Copland
(En homenaje al los combatientes aliados de la II Guerra Mundial)
***
Historia (del gr. ἱστορία, investigación): narración de los sucesos del pasado.
Historiografía (del gr. ἱστορία, historia, y -γραφία, -grafía): escritura de la historia.

Enlaces históricos
—Prehistoria
El tiempo geológico [+ neologismo «Antropoceno»]

Primeras civilizaciones
profesorfrancisco.es

Prehistoria – Historia
Fuente: Pintarest
Con la caída del Imperio Romano de Occidente (476) finaliza la Edad Antigua y comienza la Edad Media. Ésta acaba con el final del Imperio Romano de Oriente (1453), dando comienzo la Edad Moderna. La Edad Contemporánea comienza con la Revolución Francesa (1879) y se extiende hasta nuestros días.

Cronología de la Tierra
Fuente
Atención a los nombres y su etimología [orden cronológico]: PALEOZOICO (de palaios, antiguo, y zoikos, relativo a los animales), Cámbrico (de Cambria: Gales, por estudiarse aquí rocas de este período), MESOZOICO (de meso, medio o intermedio, y zoikos),  Jurásico (de Jura, cordillera entre Francia y Suiza, donde se estudiaron rocas de este período), Cretáceo (de creta: roca o caliza de Creta), CENOZOICO (de kainos, nuevo o reciente, y zoikos), Cuaternario (de quaternarius, cuatro elementos), Pleistoceno (de pleistos, lo más, y kainos, nuevo).

viernes, 15 de octubre de 2021

La jubilación médica


La jubilación puede suponer hundimiento o liberación.

Capítulo 36 de La encrucijada del galeno. Párrafos: La jubilación médica. [Carlos Abré dialoga con el doctor Rilke, médico veterano, sobre la jubilación.]
Todavía le quedaba distante la jubilación, cuyo umbral se iba a cambiar, pero Carlos Abré reparó en una realidad agria: el habitual desagradecimiento con quienes finalizaban su vida laboral. Aparte del olvido inexcusable de los que se jubilaban, quienes deseaban prolongar su vida laboral por sentirse con fuerzas y todavía útiles, ya no tenían esa opción. Otra torpeza. Era el caso del doctor Rilke, con quien había hablado del tema.  
–Ahora en Hispania –decía Rilke–, los médicos tenemos que jubilarnos forzosamente a los sesenta y cinco años; antes podíamos esperar hasta los setenta. O incluso continuar como eméritos. 
–Algunos médicos quemados –observaba Abré– querrían jubilarse antes de la edad reglamentaria y no los dejan. Y los más optimistas firmarían por permanecer en su puesto sine die. Ya sabes que nunca llueve a gusto de todos. 
–Los médicos en edad de jubilación deben dejar paso a los jóvenes, y es cierto que muchos se anticiparían gustosos a su liberación. Pero los veteranos en buenas condiciones psicofísicas podrían ser útiles asesores. La experiencia médica es un valor. 
–Médicos o no, los viejos…, y a ti Fernando no te considero entre ellos, están siendo arrinconados desde hace mucho. ¡Qué error verlos como un estorbo! No es bueno el desprecio de la vejez –el joven Abré la contemplaba entre comillas. Había reparado muchas veces en las diferencias de envejecer de la gente. Unos lo llevaban fatal, otros asimilaban los cambios naturales. Había jóvenes que aparentaban ancianos, y ancianos cronológicos que irradiaban juventud. Y al viejo Rilke, que no era un anciano, lo tenía por un ser eternamente joven.

Adiós – Glenn Miller
***
Nota: Edad de jubilación
En el momento temporal en que se desarrolla la acción de la novela, los médicos de los servicios de salud cesaban al cumplir 65 años. Desde 2016, algunos servicios de salud han permitido a su personal trabajar más allá de esa edad. Pero teniendo en cuenta las características de la profesión médica (larga formación, muchas horas asistenciales, riesgos de salud), se ha elaborado un «informe-propuesta de jubilación», por sindicato, en el que se solicita un régimen especial de jubilación voluntaria del médico entre los 60 y los 70 años.

miércoles, 13 de octubre de 2021

Soñando una medicina sensata


La medicina sin prisa es bendición para el médico y garantía para el paciente.
 
Capítulo 16 de La encrucijada del galeno. Párrafos: Soñando una medicina sensata. [Carlos Abré considera los inconvenientes de la medicina apresurada.*]
Cuántas veces soñara Abré una medicina sin prisa. No en el sentido de lenta, sino de sosegada, por la seguridad del paciente. Tal aspiración era legítima y posible; así lo entendía. Pero para hacerse realidad tenía que producirse una modificación en la agenda médica, unida al respeto de las normas de uso de los servicios de atención primaria (cumplir horarios de citación, no forzar citas injustificadas, avisar en caso de incomparecencia), dando fin a la «cultura de la inmediatez», lo cual habría de propiciar la consecución de objetivos; de objetivos racionales. La conveniencia de la calma en el ejercicio de la medicina propugnada por el doctor Bastos («Con prisa, ni el café», decía), y por cualquier galeno juicioso, era la reiteración de una eterna demanda; ningún individuo inteligente y responsable rechazaría esta propuesta sensata; cualquier usuario del sistema público de salud con dos dedos de frente habría de asumir esta idea razonable.  

(...) 

El pensamiento de Abré voló hacia la figura de una médica de familia, llamada Amanda Bianca, que era muy buena dibujante, ocupaba una interinidad en el ámbito de las urgencias hospitalarias y formaba parte de un comité de ética médica. La doctora Bianca expresaba su inconformismo con la situación sanitaria y profesional, mediante ilustraciones humorísticas que llevaban una gran carga satírica. Manifestaba así su sentir más allá de las palabras, no olvidando la crítica al apresuramiento, detonante del error. Una vez que Abré refirió en un tuit las tres circunstancias principales que, a su modo de ver, desea todo galeno (estabilidad profesional, encontrarse a gusto en el lugar donde trabaja y ser reconocido por la labor que se desempeña), ella respondió que carecía de las tres. Entonces, para consolarla de algún modo de su infortunio, él le escribió: «Aquí es difícil estar bendecido por una de estas tres circunstancias favorables; tener dos es gran fortuna; y el trío ya es milagro». Y Bianca marcó este tuit como favorito. El humor no estaba reñido con la medicina, ni mucho menos; al contrario, era una necesaria válvula de liberación.
*La medicina apresurada y la medicina reiterativa (o «del hámster», mostrada en la ilustración de Mónica Lalanda) son contrarias al buen hacer médico, que exige calma, una medicina sin prisa, y acciones resolutivas frente a las repetitivas.

Peace Piece – Bill Evans

domingo, 10 de octubre de 2021

Poemas escogidos en lengua española


Presentamos una selección de poemas en lengua castellana en orden cronológico de autores y alfabético de las composiciones cuando hay varias de un mismo autor. Se trata de creaciones representativas de poetas españoles e hispanoamericanos. Todos estos poemas ya han sido recogidos en el blog en sus correspondientes apartados temáticos (es decir, clasificados por temas: Amor, Vida, Muerte, Naturaleza, Dios, Tiempo...); hacia el final de la entrada Poesía inacabable hay un índice, POEMAS POR TEMÁTICA, y desde ahí enlaces a cada relación de poemas según el tema (muchos de ellos con reproducción de versos significativos e interesantes lecturas), de la poesía española y universal, con su traducción al castellano de los originales en otras lenguas. La selección obedece a criterios de estudiosos, a lecturas propias y gusto personal. Los poemas que nos parecen sobresalientes en esta antología aparecen resaltados con color de fondo. Por otra parte, dejamos enlaces introductorios, biográficos y a poemas de autores.

Toda antología es injusta por las inevitables exclusiones, consecuencia de limitaciones o del desconocimiento. Y aunque en este florilegio no sean magistrales todas los poemas que están, ni estén todos los que son magníficos, creemos que es lo suficientemente digna para hacernos idea de la poesía hispana en su conjunto y de su evolución. Por descontado, también del goce que producen.

¡Disfruten de la buena poesía!

[Se especifica la nacionalidad de los poetas hispanoamericanos.]

SIGLOS XII-XV: Edad Media (y Prerrenacimiento)
Cantar de Mío Cid, Anónimo (s. XII), Anónimo
Libro de Apolonio, Anónimo (c. 1250) [v. AQUÍ/AQUÍ]
En Ávila, mis ojos, Anónimo (s. XV)
Romance del prisionero, Anónimo (s. XV)
Una sañosa porfía, Juan del Encina

Cantar de Mío Cid: anónimo monumento de la poesía épica.

Gonzalo de Berceo: primer poeta que escribe en castellano con nombre conocido.

Arcipreste de Hita (Juan Ruiz): escribió la obra más importante de la época,
el Libro de Buen Amor.

Las Coplas de Manrique merecen estar escritas en letras de oro –Lope de Vega.

Romances: anónimas joyas poéticas.

Juan del Encina: músico y poeta a reivindicar.

Introducción a la poesía medieval castellana

Escrito está en mi alma vuestro gesto (Soneto V), Garcilaso de la Vega
Oda a la flor de Gnido, Garcilaso de la Vega 
Vida retirada (Oda I), Fray Luis de León
Llama de amor viva, San Juan de la Cruz
Noche oscura del alma, San Juan de la Cruz

A Garcilaso de la Vega se lo ha llamado «príncipe de los poetas castellanos».

Fray Luis de León: máximo exponente de la literatura ascética del Renacimiento.

San Juan de la Cruz es una de las cumbres de la lírica renacentista.

El Siglo de Oro: Barroco

SIGLO XVII. Siglo de Oro: Barroco
Ovillejos, Miguel de Cervantes
Amarrado al duro banco, Luis de Góngora
Ándeme yo caliente, Luis de Góngora
Entre los sueltos caballos, Luis de Góngora
La más bella niña (Dejadme llorar, orillas del mar), Luis de Góngora
Servía en Orán al rey, Luis de Góngora
A la noche (Soneto 137), Lope de Vega (1562-1635) –Poemas LV/Antología
A mis soledades voy, Lope de Vega
Desmayarse, atreverse, estar furioso (Soneto 126), Lope de Vega
Ir y quedarse, y con quedar partirse (Soneto 61), Lope de Vega
Pobre barquilla mía, Lope de Vega
A una nariz (Soneto), Francisco de Quevedo (1580-1645) –Poemas FQ
Ah de la vida!, Francisco de Quevedo
Epístola satírica y censoria (No he de callar por más que con el dedo), Quevedo
Poderoso caballero es don Dinero, Francisco de Quevedo
Al Céfiro (Oda sáfica), Esteban Manuel de Villegas (1589-1669) –Poemas EMV
Segundo soliloquio de Segismundo*, Calderón de la Barca [*De La vida es sueño]
Hombres necios, Sor Juana Inés de la Cruz –Poemas SJIC [NE: Nueva España]

Los tres grandes poetas del Siglo de Oro: Góngora, Lope y Quevedo.

Lope de Vega es para muchos analistas el mayor poeta en lengua española.

Sor Juana Inés de la Cruz: figura de las letras hispanoamericanas del s. XVII.

El Siglo de Oro: Barroco


Rosana en los fuegos, Juan Meléndez Valdés

De la mediocre poesía del s. XVIII cabe rescatar a Meléndez Valdés, aunque se ha revalorizado algo la producción poética del excéntrico Torres de Villarroel.


Un castellano leal, Duque de Rivas
Sé más feliz que yo [A una bella], Juan Arolas (1805-1849) –Poemas JA/PJA
Canción del pirata (Que es mi barco mi tesoro), José de Espronceda 
Canto a Teresa, José de Espronceda
El reo de muerte, José de Espronceda
Himno a la inmortalidad, José de Espronceda
Soledad del alma, Gertrudis Gómez de Avellaneda Poemas GGA/Antología
¡Quién supiera escribir!, Ramón de Campoamor
A la memoria de un ángel –Stella matutina–, Manuel del Palacio (1831-1906)
Amor oculto, Manuel del Palacio –Poemas MP
Cerraron sus ojos (Rima LXXIII), Gustavo Adolfo Bécquer –Poemas GAB
Del salón en el ángulo oscuro (Rima VII), Gustavo Adolfo Bécquer
Olas gigantes que os rompéis bramando (Rima LII), Gustavo Adolfo Bécquer
Volverán las oscuras golondrinas (Rima LIII), Gustavo Adolfo Bécquer
Qué hermoso es ver el día (Rima LXVII), Gustavo Adolfo Bécquer
Era apacible el día, Rosalía de Castro
Glorias hay que deslumbran, Rosalía de Castro
Los robles, Rosalía de Castro Santa escolástica, Rosalía de Castro
Mi último adiós (Despedida), José Rizal (Filipinas, 1861-1896) –Poemas JR/PJR

Espronceda es el poeta más representativo del Romanticismo español.

Bécquer y Rosalía de Castro son los precursores de la poesía moderna española.

Campoamor y Núñez de Arce son representantes de la poesía realista.

De la segunda mitad del s. XIX dijo Clarín que en España había «dos poetas y medio»: Campoamor y Núñez de Arce, los enteros, y Manuel del Palacio, el medio.

El Romanticismo literario en España

SIGLOS XIX-XX: Modernismo (1880-1920), Generación del 98Nuevas corrientes: Intelectualismo, Humanismo
Rosa de Job, Ramón María del Valle-Inclán
A Roosevelt, Rubén Darío (Nicaragua, 1867-1916) –Poemas RD [Introducción]
Al rey Óscar, Rubén Darío 
Cyrano en España, Rubén Darío
Lo fatal, Rubén Darío
Marcha triunfal, Rubén Darío
Sonatina, Rubén Darío
En paz, Amado Nervo (México, 1870-1919) –Poemas AN/Antología
AdelfosManuel Machado (1874-1947) [v. también AQUÍ] –Poemas MM
Castilla, Manuel Machado
El viajero, Antonio Machado
Las moscas, Antonio Machado
Recuerdo infantil, Antonio Machado
Retrato, Antonio Machado
Un loco, Antonio Machado
Soy animal de fondo, Juan Ramón Jiménez
Vencidos, León Felipe (1884-1968) –Poemas de LF [Poesía del destierro]
Lo inefable, Delmira Agustini (Uruguay, 1886-1914) –Poemas DA/Antología
Íntima, Delmira Agustini
Rubén Darío: príncipe de las letras castellanas, poeta de Hispanoamérica,
marca un antes y un después en la poesía en lengua castellana.

Entre los poetas hispanoamericanos más importantes:
Agustini, Mistral, Storni, Vallejo, Huidobro.

El Modernismo literario

Se querían, Vicente Aleixandre 
La guitarra, Federico García Lorca
Lluvia, Federico García Lorca 
New York (oficina y denuncia), Federico García Lorca
Nocturnos de la ventana, Federico García Lorca
El suicida, Jorge Luis Borges

Poetas españoles destacados del siglo XX nacidos antes de 1900:
hermanos Machado, Juan R. Jiménez, Aleixandre, García Lorca.

Piedra de horno, Nicolás Guillén
Me gusta cuando callas, de Pablo Neruda
Anhelo, Laura Victoria (Colombia, 1904-2004) –Poemas LV/PLV
Playa [A Federico García Lorca], Manuel Altolaguirre (1905-1959) –Poemas MA
Elegía (a Ramón Sijé), Miguel Hernández
Eterna sombra, Miguel Hernández
Me sobra el corazón, Miguel Hernández
Nanas de la cebolla, Miguel Hernández
Sentado sobre los muertos, Miguel Hernández
Vuelo, Miguel Hernández

Pablo Neruda: el mejor poeta de Hispanoamérica después de Rubén Darío.

Miguel Hernández sobresale entre los poetas españoles nacidos después de 1900.

Memoria, Dionisio Ridruejo
La calle, Octavio Paz (México, 1914-1998) –Poemas de OP/Antología
Silencio, Octavio Paz 
Manifiesto, Nicanor Parra
Nota biográfica (Autobiografía), Gloria Fuertes (1917-1998) –Poemas GF
Vida, José Hierro (1922-2002) –Poemas JH/PJH
Hijas del viento, Alejandra Pizarnik

En Hispanoamérica también cabe recordar a Octavio Paz.

Y en la segunda mitad del s. XX no podemos olvidar a la poetisa Pizarnik.

Poesía española de postguerra (1936-1975) 

Derrota, Rafael Cadenas (Venezuela, 1930) –Poemas RC/PRC

Entre los poetas más destacados de la Generación del 50: José Ángel Valente y José Agustín Goytisolo. Se discute si José Hierro debe incluirse en esta generación.


Según Luis A. de Cuenca, entre los mejores poetas actuales: 
Pere Gimferrer, Miguel d'Ors, Julio Martínez Mesanza.