Siguiendo con música y danza, al hilo de las danzas de La Novia vendida de Smetana, traigo una escena de baile del film Siete novias para siete hermanos, que según el crítico Pablo Kurt “más que una entretenidísima película musical con brillantes bailes, es un alegre canto a la vida que encierra todo el espíritu de los musicales del Hollywood de la época. Es decir, un magnífico antidepresivo”. Adecuado entonces para la primavera, estación propicia a las recaídas emocionales.
¡A danzar en el Oeste! (y en el Norte, el Sur y el Este)
Nota.- Desaparecido el vídeo inicial insertamos otro posterior.
¡Qué maravilla, José Manuel! Me parece la mejor de las medicinas para esos estados de los que hablas; estoy absolutamente de acuerdo con Pablo Kurt.
ResponderEliminarMuchos bicos y muchas gracias por esta dosis de vitalidad y de optimismo.
Hay tratamientos no farmacológicos que van mejor que los medicamentos, amiga Lola. Y algunos como esta danza folklórica son de lo mejor para revitalizar.
ResponderEliminarBicos.