Trabajar en un centro de salud entre festivos y durante las vacaciones ajenas puede ser un auténtico suplicio. Demasiada presión asistencial en la atención primaria al tener que asumir la carga de trabajo de los ausentes; excesiva angustia en los profesionales de la medicina; inasumible la asunción innecesaria de riesgos. Es como caminar solos en aguas pantanosas: es muy fácil que el más experto se hunda, es muy probable que el mejor médico de familia cometa un error.
Día de locos: mermados de recursos humanos y con una presión "urgente" atroz. ¿Cómo gestionar la #atencionprimaria en periodos difíciles?
— José Manuel Brea (@xoselbrea) diciembre 23, 2013
Es deber de los gestores sanitarios prever y ordenar la asistencia en los momentos críticos. Y la primera decisión responsable, con el fin de asegurar la calidad asistencial y garantizar la seguridad de los pacientes, es establecer límites sensatos.
Habría que establecer "límites asistenciales" en periodos festivos y vacacionales. Un centro de salud no es una fábrica #gestionsanitaria
— José Manuel Brea (@xoselbrea) diciembre 23, 2013
@doctorcasado Es deber de los gestores sanitarios prever (prevenir) y ordenar la asistencia. Si no lo hacen, no son tal #gestionsanitaria
— José Manuel Brea (@xoselbrea) diciembre 23, 2013
Insisto, han de implicarse los responsables de la gestión sanitaria, por encima de los ruegos o las súplicas que les puedan hacer los profesionales a los usuarios, para que desistan de solicitar consultas no urgentes en momentos concretos o hagan un buen uso de los servicios de salud en todo momento.
Uso adecuado de los servicios sanitarios
Mensajes como el que sigue están bien, pero parecen insuficientes
A mi este anuncio siempre me ha parecido horroroso. No se explica en absoluto para qué es la atención urgente en los Centros de Salud, de hecho indica que ante una dolencia común (que se ejemplifica con lo que parece un catarro) se ha de ir al Centro de Atención primaria, da igual citado que sin cita.
ResponderEliminarEn realidad, a un ciudadano de mediana inteligencia no haría falta hacerle entender lo que el sentido común le dicta como algo que no admite demora: un dolor agudo, un malestar intenso, una alteración de la conciencia… A otros habría que explicarles que otros motivos de consulta (tos, catarro, picor localizado, un granito…) pueden ser citados de manera normal con su médico de cabecera, o darles información más precisa mediante folletos o guías aclaratorias.
EliminarPero tienes razón, laliluli, en lo que apuntas. Se envían mensajes equívocos, o a la ligera, a través de los medios (por quienes desconocen el sistema sanitario o no trabajan en él), aconsejando que ante una dolencia común o leve se acuda al centro de salud, en cualquier momento y al médico que sea, aunque no le corresponde por asignación. Dudo que semejantes frivolidades sucedan en otros países. Aunque es cierto que los responsables sanitarios también han tratado de promover el buen uso de los servicios de urgencia; eso sí, con escaso o nulo éxito.
Sobre propuestas para el buen uso de las urgencias en general he editado esta entrada:
http://medymel.blogspot.com.es/2013/02/propuestas-para-el-buen-uso-de-las.html
Y sobre las urgencias extrahospitalarias en particular, esta otra a modo de diálogo:
http://medymel.blogspot.com.es/2012/09/dialogos-politico-sanitarios-10.html
(En ambas entradas he dejado interesantes enlaces sobre el tema)
Por un lado se brinda un servicio sanitario, abierto y accesible, continuo y permanente; y por otro está el uso que se le da, racional o abusivo. Evidentemente, la respuesta no puede ser la misma en un caso u otro. La cantidad choca con la calidad.
Saludos y gracias por tu comentario.