lunes, 24 de febrero de 2025

Problemas menores vs. síntomas preocupantes


La preocupación por la salud debe tener un límite, porque el continuo desasosiego puede acarrear enfermedad.

Hay una queja frecuente por la sobrecarga asistencial, sobre todo en el primer nivel, en la atención primaria, en los centros de salud. Esa que puede estar fundada cuando hay un abuso manifiesto o reiterado, en especial de la demanda urgente por cuestiones demorables, por problemas menores; abuso que puede llevar a situaciones degradantes (*). Pero si nos paramos a reflexionar, llegaremos a la conclusión de que el paciente no acude de manera abusiva por problemas menores, sino por síntomas que no sabe interpretar y que antes sabía valorar. ¿Ha habido un cambio de mentalidad de los individuos? Veamos... Se ha fomentado la prevención a toda costa, infundido temor y vendido hiperaccesibilidad. Y la consecuencia es una demanda creciente hasta el caos asistencial. ¿Cuál es la solución? Recular, en el sentido de retornar al sentido común. Una ardua tarea que implica a la sociedad en su conjunto, a personas, agentes sociales e instituciones.
____
(*) v. en blog:

Don't Worry Be Happy - Bobby McFerrin

No hay comentarios:

Publicar un comentario